La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) recientemente encontró lo que describió como una “situación sórdida” en la frontera entre México y Estados Unidos: sandías falsas llenas de metanfetamina escondidas entre un cargamento de sandías genuinas.
La CBP dijo en un declaración que oficiales en el puerto de entrada de Otay Mesa, entre San Diego y Tijuana, incautaron más de cinco millones de dólares en metanfetamina “disfrazada y oculta dentro de un cargamento de sandías”.
El hecho ocurrió el viernes pasado cuando un hombre de 29 años llegó a las Instalaciones Comerciales de Otay Mesa en un camión con remolque. El conductor estaba “buscando ingresar a los Estados Unidos desde México, transportando un cargamento declarado de sandías”, dijo CBP.
El hombre y su carga fueron enviados a un área de inspección secundaria, donde se descargó el envío de sandías para un examen más detallado.
«Tras una inspección cuidadosa, los oficiales descubrieron 1.220 paquetes envueltos en papel, disfrazados de sandías dentro del envío», dijo la CBP.
“El contenido de los paquetes fue analizado e identificado como metanfetamina, con un peso total de 4,587 libras. [2,080 kg]. El valor estimado en la calle de las drogas supera los cinco millones de dólares”, dijo la agencia.
Los agentes de CBP confiscaron la metanfetamina y el camión con remolque, mientras que el conductor “fue entregado a la custodia de Investigaciones de Seguridad Nacional para una mayor investigación”, dijo CBP.
En el pasado, los contrabandistas han intentado ocultar drogas en envíos de una variedad de productos diferentes, incluidas fresas y cebollas. A principios de este mes, oficiales de CBP en Otay Mesa Encuentran casi 300 kilogramos de metanfetamina escondidos en un cargamento de apio.
Los contrabandistas han tratado de ocultar narcóticos de formas aún más ingeniosas, incluso insertando pastillas de fentanilo en tamales y llenando botellas de tequila con metanfetamina líquida.
Rosa E. Hernández, directora del puerto de Otay Mesa, dijo que estaba “increíblemente orgullosa de nuestro equipo por su trabajo excepcional durante las últimas semanas para descubrir métodos de contrabando sofisticados y diversos”.
“A medida que los cárteles de la droga sigan evolucionando sus técnicas de contrabando, seguiremos encontrando nuevas y mejores formas de evitar que estas drogas peligrosas y otros tipos de contrabando entren al país”, dijo.
Los cárteles mexicanos fabrican metanfetamina y otras drogas sintéticas en laboratorios clandestinos.
El mes pasado, la Marina desmanteló uno de esos laboratorios en Sinaloa, confiscando al mismo tiempo 3.920 kilogramos de material presuntamente metanfetamina junto con 28.600 litros líquidos y 2.250 kg de precursores químicos.
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