La economía del Reino Unido entró en una recesión técnica a finales de 2023 al encadenar dos trimestres consecutivos de contracción, con un retroceso del PIB del 0.3 % de octubre a diciembre, informó este jueves la Oficina nacional de estadística (ONS, en inglés).
Este descenso del producto interior bruto (PIB) en los últimos tres meses del año se sumó a la caída de un 0.1 % entre julio y septiembre, indicó el organismo, al dar a conocer el primero de dos cálculos.
La ONS señaló que, pese a registrarse una recesión técnica en ese periodo, la economía creció un 0.1 % respecto a 2022.
En el tercer trimestre de 2023 hubo contracciones en los principales sectores económicos, con una caída del 0.2 % de los servicios, un 1 % en la producción industrial y un 1.3 % de la construcción.
Hubo un descenso del volumen de comercio neto y del gasto tanto del Gobierno como de los hogares, apuntó la ONS.
Es la primera vez que el Reino Unido entra en recesión desde que lo hiciera en la primera mitad de 2020, debido a los efectos de la pandemia.
Los datos suponen un golpe, en un año de elecciones generales, para el primer ministro conservador, Rishi Sunak, que prometió como una de sus cinco prioridades hacer crecer la economía.
Tras conocer los resultados, el ministro de Economía, Jeremy Hunt, dijo que el bajo crecimiento «no es una sorpresa» mientras el Banco de Inglaterra mantenga altos los tipos de interés para bajar la inflación.
La portavoz laborista de Economía, Rachel Reeves, dijo por su parte que la promesa de Rishi Sunak de hacer crecer la economía está ahora hecha trizas».
El jefe del Gobierno «ya no puede decir que su plan funciona», declaró Reeves, que defendió que solo su partido «tiene un plan a largo plazo para más empleos, más inversión y facturas reducidas».