Mientras autoridades de Michoacán afirman que el paro de limoneros se limita a partes de Apatzingán y Buenavista, minimizan las denuncias por extorsión y culpan a los bajos precios por afectar a los productores. Sin embargo, Guadalupe Mora, exproductor de limón, sostiene que la situación es peor que nunca, continúan pagando derecho de piso y el cierre no se debe a los bajos precios del producto.
Carlos Torres Piña, secretario de Gobierno de Michoacán, insiste en que el paro en el corte de limón se debe a la caída de los precios, señalando que solo los municipios de Apatzingán y Buenavista han detenido sus actividades relacionadas con el cítrico.
En entrevista con Pascal Beltrán del Río para Imagen Radio, Torres Piña explica que Michoacán cuenta con 26 municipios productores de limón. Aunque el corte no se realizó en Apatzingán y Buenavista el lunes, en los demás municipios se llevó a cabo sin mayores problemas.
El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, niega que las zonas limoneras estén paralizadas debido a denuncias de extorsión, mencionando la detención de células del crimen organizado dedicadas a esta actividad en el último año.
Guadalupe Mora contradice a las autoridades locales, afirmando que el paro de limoneros en Apatzingán y Buenavista se debe a la extorsión del crimen organizado, específicamente de Los Viagras y Los Blancos de Troya. Mora revela que se les cobra hasta 4 pesos por kilo en Apatzingán, donde hay más cárteles, y describe cómo el crimen organizado también extorsiona a otros sectores comerciales en la región.
Mora hace un llamado al Presidente Andrés Manuel López Obrador y a la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, para que tomen medidas contra la extorsión en la región de Tierra Caliente en Michoacán, donde asegura que el gobierno los tiene olvidados.
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