El Gobierno Federal destinará el próximo año 150 mil millones de pesos para tres proyectos prioritarios de la Cuarta Transformación, pero 25 estados no recibirán un solo peso para infraestructura y modernización carretera entre ellos Coahuila, informó Jaime Bueno Zertuche, diputado federal (PRI).
“Vemos con preocupación que 8 de cada 10 pesos del presupuesto federal 2024 ya están etiquetados, no tienen margen de acción, que se reduce el monto asignado para programas y proyectos de inversión en un 36.6% y de lo que queda, el 50% va destinado a las obras faraónicas que ya conocemos y que beneficia solo a un par de regiones del país”.
“Ni mencionar a Pemex, se trataba de aumentar la producción de barriles, no de convertirlo en un barril sin fondo. Se destinan y etiquetan más recursos de manera irresponsable, que festejan únicamente los dueños de los calificadores que están recibiendo sus pagos a sobretasas de interés. Por primera vez en la historia de nuestro país, el pago a intereses de la deuda será igual que todas las participaciones dirigidas a los estados, un hecho insólito”.
Sobre todo, añadió, hay un trato desigual a los estados, es discriminatorio y ofensivo en lo que respecta a la asignación de inversión pública y a la asignación de los programas sociales.
Pareciera que al autonombrado gobierno transformador se le olvida que gobierna para todo el país, pero no hay recursos para infraestructura carretera y no hay presupuesto para impulsar el desarrollo regional.
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En Coahuila, no hay recursos federales para modificar las curvas en el tramo de Los Chorros en Arteaga y tampoco para ampliar la carretera a Derramadero, en Saltillo.
Además, en el país la economía no mejora, pese al reparto de los programas sociales, las familias no completan para el gasto y eso afecta su calidad de vida.
“¿De qué ha servido el incremento al salario mínimo o las transferencias directas a beneficiarios de los programas sociales si con la inflación no alcanza para nada? No podemos tener una economía basada en terquedades, arranques o complejos en la que sale más caro el remedio que la enfermedad”.
“Tienen al país hecho pedazos y pretenden mejorar solo con programas sociales mal implementados, no podemos conformarnos con cuentas alegres e información sesgada porque no enfrentamos de cara con la realidad: hay más pobreza, menos salud, menos educación, menos infraestructura y más inseguridad”.
Añadió que en el presupuesto de egresos del próximo año, la Federación contempla 380 millones de pesos para el pago de un avión presidencial y luego destinarían más de 6 mil 300 mdp etiquetados para el mismo fin. “¿Al final se dieron cuenta de que sí quieren comprar un nuevo avión? ¿Dónde quedó el avión?”, cuestionó.
