WASHINGTON.- Julie Kozack, directora de comunicación del Fondo Monetario Internacional (FMI), afirmó que Argentina y el nuevo gobierno que implementará el presidente electo Javier Milei necesitará de un banco central “fuerte y creíble” para reducir la inflación.
Durante una rueda de prensa la directora fue cuestionada si el nombramiento del economista Santiago Bausili (cercano al futuro ministro de Economía, Luis Caputo) como titular del Banco Central de Argentina (BCRA), dejaría en duda la independencia de la institución.
TE PUEDE INTERESAR: Alberto Fujimori, expresidente de Perú, queda en libertad tras 16 años en prisión
La portavoz del FMI decisió no entrar en polémica e insistió en que es necesaria la fortaleza del Banco Central en un momento en el que la administración que entrará está concentrada en implementar “un plan de estabilización sólido, creíble y respaldado políticamente para abordar los desequilibrios macroeconómicos de Argentina”.
“La situación económica en Argentina sigue siendo desafiante y muy compleja. La inflación es muy alta y las reservas son extremadamente bajas. Y esto, por supuesto, ocurre en el contexto de condiciones sociales muy frágiles”, expresó Kozack.
HORA DE NEGOCIAR
Uno de los principales retos que tendrá el argentino Javier Milei, quien asumirá el próximo 10 de diciembre el cargo, es sentarse a negociar con el Fondo Monetario Internacional, a quien debe cerca de 46 mil millones de dólares.
El presidente electo está consciente que el acuerdo de refinanciación que se firmó en 2022 con el FMI está “caído”, esto debido a que Argentina ha incumplido las metas fiscales, de acumulación de reservas y de tope a la financiación del Tesoro por parte del Banco Central que se establecieron.
Con el cumplimiento de estas metas se abre la condición para que el FMI gire de manera trimestral desembolsos que permitan al país pagar los vencimientos con el organismo y no caer en mora.
TE PUEDE INTERESAR: Guterres invoca el artículo 99 de la ONU para pedir un alto al fuego en Gaza
Kozack explicó que luego de la elección, un equipo cercano al presidente electo viajó a Estados Unidos, en donde sostuvieron una reunión con un grupo del Fondo Monetario.
“La discusión se centró en comprender mejor los planes de las autoridades entrantes para restaurar urgentemente la estabilidad macroeconómica, así como sus planes de reformas para impulsar las perspectivas de crecimiento a mediano plazo de Argentina”, detalló.
