Muchas de las historias que contamos actualmente se habrán perdido en el tiempo una vez que pasen de moda o no se les dé relevancia, ejemplos de esta “amnesia colectiva” sobran. No obstante, y como para hacer un esfuerzo por conservarnos ante el tiempo, contamos nuestras vivencias o las de otros a amigos y conocidos. Esta es la esencia de “Cochabamba”, la más reciente novela de Jorge F. Hernández.
El autor explicó en entrevista con VANGUARDIA que toda esta novela se desprende de una plática que tuvo con su amigo Xavier Dupont, mismo que lo invitó a escuchar y escribir la historia de su madre, añadiendo que era fan de su escritura y que esta historia era de su interés.
“Lo que quise yo era invitar al lector a que estuviera sentado en una mesa conmigo al tiempo que me lo está narrando el hijo de Catalina (Dupont), porque fue una conversación que duró casi 72 horas sin dormir los dos. Él no paraba de hablar y yo no paraba de tomar notas” declaró el autor.
Jorge agregó que tuvo que “madurar” esta historia al menos dos años antes de “ponerla en tinta”. Además de la dedicatoria que tiene esta novela a Gabriel García Márquez y su esposa Mercedes Barcha, de quienes agradece su amistad y el consejo de Mercedes para atreverse a plasmar esta interesante historia.
Durante este proceso de “madurar la obra” nos cuenta que la presentó oralmente en diferentes lugares, esto con el objetivo de tomar en cuenta las opiniones de los oyentes. Como una anécdota curiosa de las reacciones del público, Jorge nos narra lo siguiente:
“Entonces, por ejemplo, en la Universidad Nacional Autónoma de México se paró un señor que empezó a agregar cosas de la historia que yo no sabía, o más bien, como que se creyó el cuento y además empezó a escribir su propio cuento” declaró el autor.
Las intenciones de Jorge, más allá de simplemente contar la historia de Catalina y la familia Dupont, es ofrecer al lector un “retrato fiel del momento”, desde Xavier hablando eventualmente en francés o intentando describirle las calles de París como si fueran de conocimiento de todos.
Aunado a esto, el autor agrega que la prosa de la novela está hecha para brindar al lector comodidad al momento de leerla, incluso que sea tan fácil que se pueda leer “en una sentada”. También espera que su público tenga la oportunidad de “aumentar la magia” de esta historia conviviendo con él y dando a conocer esta gran novela.
“Lo que deseo es que una vez que la lean, la recomienden y la regalen”, agregó Jorge, quien presentará este libro el sábado 14 de octubre a las 16:00 horas en la Feria Internacional del Libro Monterrey.
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NUEVOS PROYECTOS
Entre la conversación el autor también mencionó brevemente alguno de sus futuros proyectos, mismos que incluyen una novela —de la cual comenta que está próximo a terminar— y una antología de lo que él describe como “cuentos basados en locuras personales que sí sucedieron”, misma que llevará por nombre Despropósitos y que será parte de su nueva producción para el próximo año.
“Mando un saludo a todos los que sean saludables de Monterrey, Saltillo y todos los paisajes colindantes y les pido humildemente que me alimenten con todas las cosas ricas que se comen en esa región y que vayan a la presentación de mi novela en la FIL Monterrey”, agrega el autor afectuosamente.
Así mismo, Jorge también nos invita a su próxima plática que tendrá en Saltillo, este miércoles 25 de octubre a las 18:00 horas en el Centro Cultural La Besana, misma que promete ser tan interesante como la conversación que plasmó en “Cochabamba”.
