El juez Primero de Primera Instancia en Materia Civil del Distrito Judicial de Saltillo, Armando Esparza Ramirez, fue multado por un monto de 21,714 pesos por desacato.
La multa fue impuesta por el Poder Judicial de la Federación, luego de que Esparza Ramirez incumpliera con la orden de suspensión de maquinaria utilizada por la empresa Mando Corporation y que se encuentra en disputa legal.
El juez sólo ordenó el paro de una sección en consecuencia, se emitió el apercibimiento y multa.
Las empresas Bolim y HL Mando Corporation están en medio de una disputa legal por la apropiación de maquinaria valorada en 4.5 millones de dólares.
El abogado de Bolim, Raúl Alfonso Villarreal, explicó a VANGUARDIA que, aunque ya se ordenó el paro de la maquinaria, el Juez de Primera Instancia ha impedido su ejecución.
“El Juez de Primera Instancia está cayendo en desacato de la orden judicial y se le dio vista al Ministerio Público Federal; los directores de Mando Corporation y quienes están utilizando las máquinas están cometiendo un delito”, afirmó.
“Tenemos una nueva orden que indica que deben parar hoy martes, y en ella se sanciona al juez de primera instancia, indicándole que debe detener la maquinaria”, agregó.
Este conflicto afecta a 1,200 trabajadores y 20 empresas clientes de Mando Corporation, entre ellas Chrysler, Fiat, Honda y Volkswagen.
Bolim SLT, una sociedad de responsabilidad limitada, llegó a Coahuila en 2017, cuando adquirió maquinaria por un valor de 4.5 millones de dólares mediante un préstamo del Banco Base en Monterrey. La empresa se instaló junto a HL Mando Corporation México, Sociedad Anónima de Capital Variable, y opera con 1,200 empleados.
A raíz de la pandemia, el dueño de la empresa coreana decidió regresar a su país, pero las operaciones continuaron en Coahuila. Según el abogado Villarreal, Mando Corporation se habría apropiado de la fábrica de Bolim.
“En 2020, Mando Corporation se apoderó de la fábrica, tomó todas las máquinas, continuó pagando a los trabajadores, hizo una sustitución patronal y declaró que ya no era Bolim, sino Mando 2, lo cual pintaron en el exterior”, detalló.
Villarreal añadió que al año siguiente, en colaboración con el gobernador Miguel Ángel Riquelme y el secretario de Economía, se realizó una inauguración, la cual, según explicó, no fue una inversión, sino la apropiación de la planta, con cambio de nombre incluido.
Sobre cómo ocurrió esta apropiación, explicó: “Lo que hicieron fue contratar al representante de Bolim en México, que era coreano, y a partir de ahí cambiaron uniformes, altas, todo”.
El abogado indicó que, en uno de los acercamientos con Mando Corporation, se acordó rentar la maquinaria, pero hasta el momento no han recibido ningún pago.
“Esperamos que el Juez de Primera Instancia no haga nada, ya que el miércoles se va de vacaciones el Poder Judicial de Coahuila, y esto le daría un mes más de operación a Mando Corporation. Lo que es un hecho es que se tendrá que parar la maquinaria”, concluyó.
“El Juez de Primera Instancia está cayendo en desacato de la orden judicial y se le dio vista al Ministerio Público Federal; los directores de Mando Corporation y quienes están utilizando las máquinas están cometiendo un delito”, afirmó.
“Tenemos una nueva orden que indica que deben parar hoy martes, y en ella se sanciona al juez de primera instancia, indicándole que debe detener la maquinaria”, agregó.
Este conflicto afecta a mil 200 trabajadores y 20 empresas clientes de Mando Corporation, entre ellas Chrysler, Fiat, Honda y Volkswagen.
Bolim SLT, una sociedad de responsabilidad limitada, llegó a Coahuila en 2017, cuando adquirió maquinaria por un valor de 4.5 millones de dólares mediante un préstamo del Banco Base en Monterrey. La empresa se instaló junto a HL Mando Corporation México, Sociedad Anónima de Capital Variable, y opera con 1,200 empleados.
A raíz de la pandemia, el dueño de la empresa coreana decidió regresar a su país, pero las operaciones continuaron en Coahuila. Según el abogado Villarreal, Mando Corporation se habría apropiado de la fábrica de Bolim.
“En 2020, Mando Corporation se apoderó de la fábrica, tomó todas las máquinas, continuó pagando a los trabajadores, hizo una sustitución patronal y declaró que ya no era Bolim, sino Mando 2, lo cual pintaron en el exterior”, detalló.
Villarreal añadió que al año siguiente, en colaboración con el gobernador Miguel Ángel Riquelme y el secretario de Economía, se realizó una inauguración, la cual, según explicó, no fue una inversión, sino la apropiación de la planta, con cambio de nombre incluido.
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Sobre cómo ocurrió esta apropiación, explicó: “Lo que hicieron fue contratar al representante de Bolim en México, que era coreano, y a partir de ahí cambiaron uniformes, altas, todo”.
El abogado indicó que, en uno de los acercamientos con Mando Corporation, se acordó rentar la maquinaria, pero hasta el momento no han recibido ningún pago.
“Esperamos que el Juez de Primera Instancia no haga nada, ya que el miércoles se va de vacaciones el Poder Judicial de Coahuila, y esto le daría un mes más de operación a Mando Corporation. Lo que es un hecho es que se tendrá que parar la maquinaria”, concluyó.
SE COMPROMETEN A CUMPLIR ORDEN
Tras los recursos legales interpuestos, la defensa legal de Bolim indicó que será este miércoles cuando se paren las máquinas en disputa, de acuerdo con información del juzgado.
De acuerdo con un documento, consta que se comprometieron a que, a las 11:00 horas se ingrese a la compañía para acatar la orden del juez federal.
